El sentimiento
cruza,
trepa,
mezcla,
sacude,
arrebata,
ciega,
arremolina,
sopla,
empuja,
susurra,
corre,
grita,
sonríe,
llora,
inclina,
contornea,
alimenta,
duerme,
aparece,
enseña,
salta,
mira,
explota,
suena,
vuela,
calla,
revuelve,
toca,
extiende,
retuerce,
despierta,
parte,
acerca,
arrastra,
llega,
va,
duele,
destruye,
refugia,
crea,
nace.
Pero es verdad, las palabras son sólo eso. Por más que a veces cueste encontrar las correctas y a veces no salgan más que las equivocadas.
No tengo sólo mis palabras.
Quiero creer que sabes eso.
Quiero creer que ves más allá de mi estupidez.
Ya no voy a decir que te amo, es solo una palabra gastada, facilista.
Nada hay más cierto que sentir.
Lo que siento va más allá.
Vuelo, te siento y desaparece todo mi mundo. No hay nada más.
Puedo fundirme en tus brazos.
En la ceguera de la realidad te puedo ver, entregarme a tu voz.
El tiempo que tanto me pesa se derrite lamentando la falta de atención.
Me paro de frente a esta abstracción que me invade y la dejo ser, porque me aliviana, me permite volar lejos con mi cara pegada a tu pecho.
Extraña forma de vivir, de dormir, de moverse en la lucha constante que lidiamos contra la cotidianeidad.
Cuando los ojos arden y los recuerdos se imprimen en la mente.
Los deseos más profundos quedan expuestos. Se desnudan esperando traducción.
Mi traducción empieza y termina en vos.